Tres palabras que definen con exactitud lo vivido el pasado sábado. Y las lágrimas no son por sufrimiento, son por las risas que nos hechamos.
Fué un día de los buenos, de abrir nuevos bloques y sacarle movimientos a los yá abiertos.
Me quité incluso una gran espina que tenía bien clavada con uno de los bloques que bien parecía que se iba a quedar en la libreta de los olvidados pero... este problema tiene los dias contados, creo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario